Aquí pintando monos
La estructura de la Unidad de TIC
La estructura de las administraciones tributarias ha adoptado diversas orientaciones. Unas por tipo de impuesto: renta y ganancia de sociedades, licores y cigarrillos, vehículos, o sucesiones. Otras, con un carácter funcional donde típicamente recaudación, fiscalización y técnica jurídica, esta última con diversos nombres, aparecen frecuentemente en el primer nivel de la estructura. Más recientemente, algunas administraciones se han ido estructurando por tipo de contribuyente: grandes empresas; personas jurídicas; profesionales, trabajadores independientes y empresas unipersonales; asalariados; empresas y organismos públicos y contribuyentes exentos.
Casi siempre el criterio es mixto, en los niveles operativos, por ejemplo, la división regional suele estar presente. Estructuras guiadas por la función pueden tener unidades específicas para grandes empresas que operan, a veces, como una región más. Algunas estructuras, sobre todo las de antes, eran muy jerárquicas, con direcciones, gerencias, divisiones, departamentos y secciones. Algunas estructuras son más planas, otras matriciales y alguna vez celulares. Las bondades y defectos de esas estructuras son tema de otra discusión.
Dentro de esas estructuras, en alguna parte, hay una unidad que trata los temas de tecnologías de la información y las comunicaciones. Antes, casi siempre abajo en la estructura, dependiendo de alguien más. Se han usado Nombres como «centro de cómputo», «procesamiento de datos», «organización y sistemas», «informática», «tecnología», «tecnologías de información y telecomunicaciones» precedidos de apropiados nombres de pila como: gerencia, dirección, departamento, intendencia; y algunas veces de calificativos como general, nacional, o normativa.
Esa unidad de tecnología tiene dentro, su propia estructura. Con variaciones y nombres distintos, pero podría en varias partes asemejarse al esquema que observamos aquí. Con una unidad de desarrollo de sistemas, a veces con separación entre mantenimiento y desarrollo: una unidad de producción, responsable de administrar y operar el centro de datos, sus equipos y respaldos; a veces con divisiones para administración de base de datos y virtualización y administración de servidores. Una unidad de soporte técnico con responsabilidades en el soporte a usuarios de equipos, reales o virtuales, de escritorios, equipos portátiles y hoy equipos móviles y en ocasiones del soporte a las aplicaciones. Y una unidad de redes y comunicaciones que administra las redes, locales y de las otras, el cableado, los servicios inalámbricos, los accesos de los celulares inteligentes, las conexiones a la Internet, las conexiones dedicadas a los bancos, la telefonía IP y la configuración de intercambiadores, enrutadores, cortafuegos y otras cosas así.
Algunas veces he visto además unidades dedicadas a los temas de seguridad, calidad y a los de investigación y evaluación de nuevas tecnologías.
La estructura de esa unidad de desarrollo varía notablemente por diversas causas. Entre ellas, si la administración se asemeja más a una administradora de contratos que a una casa de construir software, pero también a aspectos relacionados con la metodología de desarrollo que se use: el RUP, SCRUM, XP. Pero es bastante común que los desarrollos se dirijan por proyectos, y que a cada proyecto se le dote de lo que necesita: un arquitecto, un analista, un par de desarrolladores, un experto en HTML5, por ejemplo. Y que, en ocasiones, quien hoy construye una parte de un sistema para controlar imprentas, mañana trabaje en un mecanismo de devolución a diplomáticos y la semana de arriba en la implementación del Operador Económico Autorizado.
Hoy al revisar la composición de los servicios de información de algunas administraciones podemos verificar la presencia de silos o islas en materia de sistemas, informaciones repetidas capturadas aquí y allí, dificultades para ver los procesos de manera integral de extremo a extremo. Funcionarios de las áreas usuarias a veces encuentran que lo construido difiere de lo especificado en buena medida por el desconocimiento del «negocio» de los desarrolladores.
Me pregunto si, como ya han sugerido algunos CIO de empresas grandes tendría sentido el estructurar la unidad de TIC a imagen y semejanza de la organización. Replicar la estructura de la administración dentro la unidad, como quiera que se llame, de tecnología, apoyado con apoyos transversal para algunos servicios comunes.
En el ejemplo de arriba. La unidad de TIC reproduce la estructura de esta hipotética administración. Los servicios comunes incluirían el soporte a temas como el registro de contribuyentes, la cuenta corriente y temas más técnicos como la gestión de flujos de trabajo y la seguridad de acceso integral a las aplicaciones. Las divisiones atenderían directamente a las unidades de grandes empresas, medianos contribuyentes, asalariados y los sujetos a un régimen simplificado de tributación.
¿Qué piensan?
Saludos y suerte.
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6 comentarios
Raul, me encanta este tema, yo vi In grande succeso la TI denominada Superintendecia de Gestión de la Información , donde BI, Biblioteca y el conocimiento de la empieza de varias formas almacenado y diseminado, como por la pagina WEB que consolidaba los datos de la empleza y contribuyente
Saludos de Brasilia!
me parece un proyecto muy interesante con eso del avance de la tecnologia ahora facilita mucho el control por parte de las administraciones tributarias asia los contribuyentes sea cual sea estructura de las administraciones solo creo que hay dar una buena reparticion y ordemamiento…….. por favor si me pueden ayudar con una informacion me interesa mucho saber como es la estructura tributaria de Mexico, Peru y Brasil y alguien me puedar ayudar la informacion de la OCDE… les agradeseria mucho atte. Nelio Arias
Hola Raúl,
El tema de la mejor estructuración del área de TICs para atención efectiva a las áreas de negocio viene presentando cambios de enfoque en el tiempo (así como la tecnología…). Muchas ideas del pasado (probadas con éxitos o fracasos relativos) vuelven a ser planteadas frente a los nuevos requisitos de negocio.
Por un lado tenemos a las áreas de negocio, con sus especificidades en el tratamiento de sus “clientes”. Por otro lado tenemos los sistemas integrados, que actualmente es una estrategia esencial para las ATs, y que requieren una visión integral de los procesos soportados.
Como ejemplo, una red de comunicaciones requiere una visión integral. Aunque cada punto a ser conectado sea exclusivo, por el camino hay equipos y enlaces de backbone que pueden/deben ser compartidos y así ser planeados con una visión global.
Lo mismo para el Registro Único de Contribuyentes… a pesar de atributos exclusivos para uso de un área, hay muchos otros de uso común. También la implementación de bases de datos tiene esta visión.
Yo creo en una visión centralizada de capacidades, tanto en áreas de desarrollo de sistemas cuanto en infra-estructuras especializadas (BD, SO, redes, etc.). La asignación de técnicos a áreas específicas se podría pensar en ciertas especialidades, como microinformática e mantenimiento de redes (en locales remotos).
En especial para el área de desarrollo de sistemas, es requerido para la concepción de sistemas, además de las especificidades sectoriales, un conocimiento fuerte del sistema integrado y de los impactos que una arquitectura de solución causa a los demás sub-sistemas.
Para solucionar al backlog de desarrollo, que es de lo que más se aquejan los gestores de áreas de negocio, se puede pensar en grupos técnicos dedicados a determinadas áreas afines, pero siempre bajo coordinación de un área central, para garantizar el mantenimiento de la integridad y coherencia del sistema integrado.
Creo que serían buenos pasos para consolidar la transversalidad de las TIC en la gestión por procesos de negocio. Si miramos alrededor no está muy lejos de lo que Google está haciendo con la dedicación de equipos específicos a sus lineas de negocio como lo son su buscador, publicidad, móvil, YouTube, Chrome y medios sociales.
Como siempre Raúl: predispones a la reflexión con tus criterios… objetivamente, las funciones de la administración tributaria pueden resumirse en INFORMACIÓN, INTERPRETACIÓN y CONTROL, si el cumplimiento resultara absolutamente voluntario por adhesión a los objetivos nacionales, por satisfacción en la actividad administrativa del Estado o por solidaridad social, la administración solo ejercería las funciones de INFORMACIÓN e INTERPRETACIÓN y si la ley tributaria pudiera traducirse en diagramas lógicos que expresaran decisiones carentes de vaguedades, ambigüedades y salvedades, la administración se limitaría a la función de INFORMACIÓN, bastaría entonces un sistema de computación de datos que prestara asistencia a los contribuyentes, administrara bases de datos de los ingresos percibidos y proporcionara reportes y diagnósticos de la recaudación para la proyección de caja del Estado.
Así planteada una relación impersonal de la administración con el sujeto pasivo de la obligación no resulta aventurado pensar que el sistema informático atendiese las necesidades de información del Estado amigablemente a través una estructura compatible con la calidad o tamaño de los sujetos.
La evolución histórica de las formas de operación de las administraciones demuestra que la tecnología lleva a las administraciones a operar cada vez con mayor prescindencia del factor humano tanto en la asistencia al contribuyente cuanto al control de su comportamiento y sus estructuras se adaptan a ellas…. “apenas” faltan estímulos al cumplimiento voluntario y legislaciones binarias para llegar a ese polo prospectivo… será cuestión de tiempo….
A mi me parece bien la estructura de una TIC especializada o funcional con una parte de caracter horizontal. El problema de las TIC es el seleccionar bien las prioridades de actuación ya que las demandas de los usuarios internos y externos son constantes y los recursos por más que nos pese, siempre tienen alguna limitación. En este sentido además de una estructura tal y como se propone es necesario, que la dotación de medios personales y materiales de las distintas àreas de la estructura sea la adecuada para cumplir con las demandas y garantizar un desarrollo equilibrado de la Administración Tributaria. Como soy ya mayor en mis tiempos jóvenes las TIC se llamaba «Mecanización». Un fuerte abrazo desde Puerto Pollensa, Mallorca, España. Luis